El estancamiento que vivimos no responde a la ubicación, a la historia, al clima natural ni político; sino a nuestra propia gente, la falta de CONSIDERACION con el prójimo hace que actualmente solo nos enfoquemos en nuestros intereses particulares pero aun así somos capaces de ponernos el pie a nosotros mismos, no se diga con el resto; vivimos con el sueño que nos suceda un milagro, y nos mantenemos firmes a la esperanza que llegue un mesías y nos libere al menos parcialmente de nuestros problemas sociales.
La única ley que no todos conocemos, pero si todos la aplicamos es la «Ley del mínimo esfuerzo», NO existe UNA SOLA institución en el Estado ecuatoriano que funcione y este comprometida con el servicio público, todas son expertas en generar excusas para justificar su incumplimiento, vagancia, dejadez, arrogancia, y prepotencia; sus puertas están protegidas por guardias de seguridad para cuidar a sus funcionarios de la indignación de los usuarios que se hallan frustrados por la inoperancia, falta de empatía, atención y solución a sus peticiones.
Los estúpidos de los políticos actuales piensan que el problema está en la falta de recursos económicos, en la inseguridad, desmotivación empresarial, la corrupción, la delincuencia, el narcotráfico, la evasión y elusión tributaria, el desempleo, la falta de educación, salud, oportunidad, convicción a una ideología política definida, entre otras. Lo que no se dan cuenta es que esto es el RESULTADO del fallido sistema de gobierno; entonces lo que corresponde es cambiar el SISTEMA e implementar uno completamente nuevo con un esquema de ingeniería jurídica.
Esta opinión es personal y nadie puede restringir mi contenido porque soy el dueño de este portal, además hoy es mi cumpleaños, y es mi primer festejo sin mi fallecida madre, a quien dedico este trabajo www.consultaslegales.ec le habría dado orgullo observar que pude materializar mi objetivo de generar una herramienta de consultas legales sin costo, y que para el efecto solo necesite mi voluntad, conocimiento y experiencia, ningún patrocinio de entidad pública, privada o de asistencia social «fundación».